Queridos amigos y aliados del Banco de Alimentos de Cali:
Con inmensa gratitud y alegría me dirijo a ustedes para celebrar juntos un hito trascendental: los 25 años del Banco de Alimentos de Cali. Esta fecha nos invita a reflexionar sobre el camino recorrido y a renovar nuestro compromiso con la lucha contra el hambre y la desigualdad en nuestra región.
En este momento de gozo, quiero rendir un homenaje especial a nuestro fundador, Monseñor Isaías Duarte Cancino, cuya visión pastoral dio origen a esta noble misión. Inspirado por las enseñanzas de Cristo, Monseñor Isaías nos recordó que alimentar al hambriento no es solo un acto de compasión, sino también un deber cristiano profundamente arraigado en el Evangelio. Como lo enseña el pasaje de Mateo 25:35: “Porque tuve hambre y ustedes me dieron de comer”, el Banco de Alimentos es un testimonio vivo de ese llamado a servir.
Durante estos 25 años, hemos sido testigos del poder transformador de la solidaridad. Gracias al apoyo de empresas, instituciones, voluntarios y benefactores, hemos podido atender a miles de personas en situación de vulnerabilidad. En una ciudad como Cali, donde tantas familias enfrentan diariamente la inseguridad alimentaria, nuestra labor se vuelve más relevante que nunca. Proveer alimento no solo sacia el cuerpo, sino que también nutre el espíritu y devuelve la esperanza a quienes más lo necesitan.
La Palabra nos recuerda constantemente la importancia de compartir el pan. Desde el milagro de los panes y los peces hasta las palabras del apóstol Pablo sobre el valor de la generosidad, encontramos un llamado constante a ser instrumentos de la providencia divina. Es esta espiritualidad la que ha guiado nuestro trabajo y que seguirá impulsándonos en los desafíos futuros.
Hoy, al mirar hacia adelante, reafirmamos nuestro compromiso de ser una respuesta concreta al hambre en nuestra región. Renovamos nuestro esfuerzo por fortalecer las redes de solidaridad, trabajar con corazón abierto y construir una Cali donde el alimento sea un derecho garantizado para todos.
Agradezco profundamente a cada uno de ustedes por su apoyo incondicional. Ustedes son parte fundamental de esta historia de amor y esperanza. Invito a todos a que sigamos trabajando juntos, inspirados por el ejemplo de Monseñor Isaías y guiados por la fe que nos une.
Que Dios los bendiga abundantemente y que este año del jubileo de la esperanza sea una ocasión para redoblar nuestro compromiso con los más necesitados.
Con gratitud y oración,
P. Joaquín Alberto Gómez
Director Ejecutivo
Fundación Arquidiocesana Banco de Alimentos Cali